Chico travieso
Demasiado débil como para resistirse a los intentos de seducción de la joven Kelly Benton, Rowdy Mackay se fue de casa hace ocho años. Su deber como marine de los Estados Unidos le ayudó a poner la distancia necesaria para evitar la tentación que le inspiraba esa pequeña arpía. Pero ahora ha regresado, y está dispuesto a involucrarse de lleno en todos esos juegos eróticos que han hecho que él y sus primos se ganen la merecida fama de los chicos más indecentes del condado.
Hubo un tiempo en el que el sueño de Kelly era sentir el calor entre los brazos del muchacho al que deseaba. Pero desde que sufrió un indeseable ataque está aterrorizada ante el contacto de cualquier hombre. Y ahora, sus miedos y un anhelante deseo aparecen de la mano de Rowdy, que hará lo que sea para salvarla de las crueles amenazas de un extraño, librarla de sus demonios y satisfacer un hambre más intensa de lo que jamás ninguno de los dos pudo imaginar.
Noches traviesas
James «Dawg» Mackey lleva años babeando por la dulce Crista Jansen. Tantos como ella ha pasado huyendo de él... y de esa peligrosa atracción que atraviesa su cuerpo como una flecha. Pero se acabó para Crista, huir ya no es una opción, pues Dawg tiene un plan. Es algo mezquino, pero muy caliente.
El mundo del chantaje es sucio, pero Dawg lo utilizará si es lo que hace falta para tener a Crista donde él quiere. Su deseo es demasiado intenso y violento como para no hacerlo. No comprende que Crista también tiene sus anhelos. Sabe lo que él está tramando, de lo que es capaz. No le pusieron su apodo por nada. Y antes de que termine la noche, Crista le hará sudar por ello.
Sueños traviesos
Natches Mackay se alejó de sus parientes hace años, excepto de sus dos primos que han sido la única familia que ha conocido. Ahora se está viendo arrastrado de nuevo a la vida de su padre de una manera que podría destruirle no sólo a él, sino también a la única mujer que le tienta hasta hacerle perder la cordura: la agente del gobierno Chaya Dane, la cual también ha librado su propia lucha para dejar atrás su pasado.
Un misión en Somerset, Kentucky, la lleva de vuelta a los sueños de Natches -y a las sombras de su padre, del que se sospecha está robando armamento del gobierno. Y esto podría costarle a Chaya más de lo que se pueda imaginar.
Intenciones traviesas
Desde que vio a Janey Mackay dándose un chapuzón en bikini, el comandante Alex Jansen se ha visto obligado a sofocar el fuego que le consume. Incluso tocarla podría significar la muerte a manos de los hombres de Mackay. Hasta ahora, la chica de sus sueños, y sus fantasías, ha vivido carente de afecto, escondiéndose del peligro que cree representan los hombres. Alex se propone demostrarle lo equivocada que está con sus caricias tortuosamente lentas.
Todo el mundo cree que Janey está a salvo ahora que su acosador está muerto. Pero cuando alguien comienza a dejarle escalofriantes notas, Alex no descansará hasta que ella esté completamente a salvo. Y sea completamente suya… en cuerpo y alma.
Engaños traviesos
Caitlyn Rogue Walker dejó atrás su vida en Boston para trabajar como profesora de una pequeña localidad de Kentucky. Pero sus sueños se vieron truncados cuando se encontró implicada en un escándalo sexual. Negándose a huir de la ciudad, Caitlyn se despojó de su identidad y se convirtió en Rogue. El sheriff Zeke Mayes sabía que esa mujer no era lo que parecía a primera vista, aunque a simple vista era bastante atractiva. Zeke estaba preparado para mantener un largo combate a fin de conseguir que Rogue baje sus defensas y sucumba al deseo. Pero Zeke se verá involucrado en un juego mortal que arrastrará a Rogue a su paso. Y cuando todo parezca ser cuestión de vida o muerte, no habrá razón para contenerse…
Besos traviesos
Demasiado débil como para resistirse a los intentos de seducción de la joven Kelly Benton, Rowdy Mackay se fue de casa hace ocho años. Su deber como marine de los Estados Unidos le ayudó a poner la distancia necesaria para evitar la tentación que le inspiraba esa pequeña arpía. Pero ahora ha regresado, y está dispuesto a involucrarse de lleno en todos esos juegos eróticos que han hecho que él y sus primos se ganen la merecida fama de los chicos más indecentes del condado.
Hubo un tiempo en el que el sueño de Kelly era sentir el calor entre los brazos del muchacho al que deseaba. Pero desde que sufrió un indeseable ataque está aterrorizada ante el contacto de cualquier hombre. Y ahora, sus miedos y un anhelante deseo aparecen de la mano de Rowdy, que hará lo que sea para salvarla de las crueles amenazas de un extraño, librarla de sus demonios y satisfacer un hambre más intensa de lo que jamás ninguno de los dos pudo imaginar.
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